Situada entre Marsella y Montecarlo, la Provenza (llamada Provincia Nostra por los romanos) es un encantador rincón del Sur de la Francia donde campos de lavanda, viñedos y olivares te invitarán a un viaje pausado y tranquilo, pero también lleno de glamour. 

Esta zona forma parte de la región Provenza-Alpes-Costa Azul ubicada en el litoral sureste francés. 

Aquí encontrarás paisajes muy variados. De hecho, las carreteras de la costa ofrecen vistas espectaculares. Es el caso de la zona de Les Calanques , entre Marsella y Cassis, donde acantilados calcáreos se alzan sobre calas turquesas. También en la carretera de la cornisa de oro, que va desde Saint Raphael a Theoule-sur-Mer podrás disfrutar de un camino fabuloso que recorre el macizo del Estérel, una cordillera donde el rojo de las rocas contrasta con el azul del mar y la vegetación mediterránea que ha encontrado su lugar sobre este antiguo volcán. Entre los mejores caminos de interior no hay que olvidarse los que atraviesan el macizo de Maures o los que rodean el pie del monte Ventoux (1912m), el “gigante de la Provenza” declarado reserva de la biosfera por la UNESCO que suele incluirse en el Tour de Francia.

Hay que decir que la Provenza es un lugar acogedor gracias a su variada selección de itinerarios donde es posible compatibilizar playas con ciudades y cultura.

En particular, entre sus paisajes únicos destacan los campos de lavanda de la Alta Provenza y el Luberon. De hecho, si hay un perfume o un símbolo que define la Provenza, este es la lavanda, una planta que florece en verano, a partir de Junio, que se utiliza mucho para extraer su aceite esencial.

La mejor lavanda en flor se puede observar en la meseta de Valensole. Aquí son muchas las granjas donde se puede contemplar esta bonita planta aromática.

Otra opción es visitar la abadía cisterciense de Senanque, cerca de Gordes, que constituye un pintoresco paisaje provenzal durante el mes de julio.

También se puede optar por una visita en una distileria de lavanda. En este caso se recomienda Chateau du Bois, una granja situada en Lagarde d’Apt, una de las pocas que produce lavanda pura y donde se puede pasear entre los campos. La mejor época para visitarla es entre junio y mediados de julio, cuando la planta florece y se cosecha.

En Provenza podrás siempre estar en contacto con la naturaleza, disfrutando de alojamientos desde los más provenzales, como chateaux rodeados de viñas, casas rurales de ensueño, hasta los más tradicionales, como hoteles o hostales. Las oficinas de turismo ofrecen también un listado de estudios, apartamentos y casas en alquiler equipados con cocina, que, en algunos casos, deberán

reservarse con un año de antelación dado que son los más solicitados.